Dream League Soccer 2019, conocido popularmente como DLS19, es considerado por muchos fans como el último gran clásico antes del gran rediseño que sufriría la saga en años posteriores. Esta entrega mantuvo el estilo jugable tradicional que había convertido a la serie en un fenómeno global, pero a la vez empezó a mostrar señales de cambios en la dirección de First Touch Games.
Gráficos pulidos, pero sin gran salto
En DLS19 se realizaron mejoras gráficas menores respecto a DLS17. Los modelos de jugadores se veían más pulidos, las texturas de césped y público recibieron pequeñas optimizaciones, y las animaciones se hicieron un poco más fluidas. Sin embargo, no hubo un salto grande en comparación a ediciones anteriores.
El juego buscaba mantenerse accesible para la mayoría de dispositivos móviles, por lo que priorizó estabilidad sobre innovación visual. Esta decisión permitió que DLS19 fuera uno de los juegos de fútbol más fluidos y amigables en cuanto a requisitos técnicos.
El sistema clásico de fichajes y gestión
DLS19 conservó el sistema que los jugadores amaban: la creación y evolución del Dream FC, reclutando jugadores reales con licencia FIFPro. Seguías avanzando a través de divisiones, mejorando el estadio, contratando estrellas, y armando una plantilla capaz de dominar en todos los torneos.
Se mantenía el mercado de transferencias tradicional, donde podías fichar, vender y renovar jugadores, además de seguir administrando los aspectos tácticos, financieros y estructurales del club.
Sin nuevas ligas, pero con una plantilla actualizada
A diferencia de otras ediciones donde ingresaban nuevas ligas, en DLS19 no se añadieron grandes novedades en cuanto a campeonatos o equipos. El enfoque estuvo en actualizar plantillas y traspasos de los jugadores de manera acorde a la temporada 2018-19.
Esto aseguraba que los usuarios pudieran armar equipos con figuras como Eden Hazard, Mohamed Salah, Kylian Mbappé o Kevin De Bruyne en su máximo esplendor.
Jugabilidad tradicional y efectiva
El sistema de juego seguía siendo el de siempre: controles sencillos, con joystick virtual y tres botones de acción (pase, disparo, centro), y un ritmo de partidos dinámico, fácil de entender pero con margen para estrategias más avanzadas.
Esta accesibilidad era parte del encanto de DLS19: fácil para nuevos jugadores, pero lo suficientemente profundo para los más veteranos que querían dominarlo a fondo.
El fin de una era
Dream League Soccer 2019 fue el último juego de la serie en mantener el formato clásico antes del reboot total que llegaría con DLS20 (con nuevos menús, nuevo motor gráfico y cambios en el sistema de fichajes).
Para muchos, DLS19 representa el cierre de la etapa dorada de Dream League Soccer: una saga que combinaba simplicidad, gestión completa y jugabilidad directa, todo en la palma de tu mano.